El nuevo Apple Watch Series 11 llega con importantes mejoras enfocadas en la salud, el rendimiento y la conectividad. La novedad más destacada es la incorporación de un sensor para el seguimiento de la presión arterial, una función orientada a detectar posibles riesgos de hipertensión de forma temprana.
Seguimiento de la presión arterial: diferente, pero útil
A diferencia de los tensiómetros tradicionales, el Apple Watch no muestra cifras exactas de presión sistólica y diastólica. En su lugar, recopila datos durante un periodo de aproximadamente 30 días para analizar patrones de comportamiento cardiovascular. Si el dispositivo detecta anomalías o posibles riesgos, enviará notificaciones directamente a la muñeca del usuario.
Aunque esta funcionalidad representa un gran avance, Apple aclara que no sustituye una consulta médica. Su propósito es servir como una herramienta complementaria de monitoreo, que puede ser compartida con profesionales de la salud para una evaluación más profunda.
Vale la pena recordar que Apple no es pionera en esta tecnología. Por ejemplo, el Huawei Watch D ya ofrecía monitoreo ambulatorio de presión arterial con certificaciones médicas (NMPA en China y MDR en Europa). Apple aún espera la aprobación de la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU.) para validar esta funcionalidad como apta para el entorno clínico.
Mejoras en el monitoreo del sueño
Otra de las áreas mejoradas es el seguimiento del sueño. El Apple Watch ahora aprovecha un conjunto de sensores para registrar de forma más precisa la frecuencia cardíaca, temperatura en la muñeca, oxigenación en sangre y frecuencia respiratoria. Esta información busca ofrecer un análisis más completo de la calidad del descanso nocturno.
Autonomía y rendimiento
Uno de los desafíos persistentes en los relojes inteligentes ha sido la duración de la batería. Apple promete hasta 24 horas de autonomía con un uso típico, sin sacrificar el diseño delgado y ligero del dispositivo. Sin embargo, el chip S10 se mantiene sin cambios respecto a la generación anterior, por lo que no hay mejoras en procesamiento interno o eficiencia energética.
Diseño más resistente
El Apple Watch Series 11 también presenta mejoras en la resistencia a impactos y rayones, gracias a un cristal Ion-X reforzado mediante un proceso de intercambio de iones. Además, Apple ha aplicado un revestimiento cerámico especial mediante deposición física de vapor, lo que aumenta la durabilidad del reloj durante actividades físicas exigentes.
Conectividad 5G y mejor cobertura
Por primera vez, el Apple Watch incorpora conectividad 5G, lo que se traduce en una experiencia más fluida al descargar música, podcasts o aplicaciones directamente desde el reloj. El dispositivo también incluye una nueva antena celular capaz de cubrir más bandas y activar simultáneamente ambas antenas internas cuando se requiere, lo que mejora notablemente la intensidad y estabilidad de la señal, aunque su rendimiento dependerá de la cobertura de cada operador.
